Hoy es domingo, me estoy riendo toda la mañana, ¿el motivo? esta tarta de cumpleaños. Resumiendo la historia: quería hacer una linda tarta de cumpleaños pero con la clásica tarta de fruta y crema pastelera. Es muy sencilla y rápida de hacer y la presentación con las frutas deja que tu imaginación se desarrolle.
Lo tenia muy fácil, un rollo de hojaldre ya hecho en la nevera y unas cuantas fresas que ayer tuve la idea de comprar. Primero contar que aunque hago el hojaldre, como la semana pasada había tenido invitados y estaba corta de tiempo me dio por comprar el hojaldre ya hecho, y ¡como no!, en esta época de mi vida que valoro tanto lo bío-ecológico, no me conforme con el hojaldre clásico que venden, no, sino que me dio por probar uno de la sección bío-ecológica sin gluten, sin grasas...lo que se dice el hojaldre perfecto para la salud!. El caso es que finalmente no lo utilice la semana pasada y hoy, precisamente hoy que quería lucirme con la tarta, se me ocurrió utilizar ese hojaldre, porque pensé que para hacer una especie de canasta en la que pudiera poner la crema amarilla y las frutas, podría servir, aunque no subiera como corresponde a un buen hojaldre de mantequilla.
Me levante temprano y con ganas de hacer la tarta. Tome mi desayuno y saque la lamina de hojaldre de la nevera. Suelen anunciar en el paquete que se saque con antelación, pero en este en concreto decía que no se hiciera así; al contrario, que se utilizara directamente de la nevera. Yo seguí las instrucciones paso a paso y estaba supercontenta porque en menos de media hora mi tarta estaría lista.
Forre el molde con el hojaldre y, pensando que igual levantaba mucho, lo peque bien a las paredes y corte su borde con los dedos para evitar que las capas se abrieran.
Pinche con el tenedor el fondo del molde, para evitar que subiera y lo cocí según instrucciones del cartón de embalaje.
Cuando a mitad de cocción se me ocurre mirar, habría que haber sacado una fotografía a mi cara de asombro; porque mi sorpresa fue que, tal como si se tratara de lana metida en agua caliente, la tarta se redujo, pasando de una cesta para contener la crema pastelera a algo así como una lamina ovalada de unas dos terceras partes del circulo original. Después de cerrar la boca y no dar crédito a lo que mis ojos veían, recordé un blog de cocina que se titula algo así como pifias de la cocina y eso me hizo soltar la carcajada.
Allí me encontraba yo mirando el disco ovalado de pasta de hojaldre, que se encontraba en el medio del molde. ¿Pero como había sido posible que la retracción de la pasta fuera de tal calibre, que había arrancado de las paredes del molde el hojaldre?. En busca de una solución para la tarta, pensé que iba hacer ahora con aquella lamina. Lo primero que valoré era que si subía lo suficiente, al menos podría rellenarlo por la mitad, pero para mas "inri" yo me había encargado de amasar bien los bordes, para que no subiera, pensando que no me quedaría hueco en la cesta para rellenar.
¡Que catástrofe!, y lo que era peor, ¡independiente de lo que hiciera con la plancha aquella, tenía pendiente una tarta de cumpleaños!. Puse mi cerebro a trabajar muriendo de la risa que me daba ver tal desastre y pensé: -"¡ nada!, le hago la crema mas espesa y como un pastel de milhojas...".
Una vez cocido lo que decía aquel embalaje que era hojaldre, este ha sido el aspecto que quedo.
Prepare en la thermomix una crema pastelera siguiendo la receta: Poner en el vaso medio litro de leche, tres huevos, cien gramos de azúcar y en lugar de los cincuenta gramos de maizena que proponen, yo puse sesenta. Lo programe todo a noventa grados durante ocho minutos y velocidad cuatro y aromatice con unas gotas de esencia de limón
Me quedo una espesa crema pastelera, justo como había imaginado. Ya solo me quedaba untar aquella especie de bocadillo de hojaldre
Con la ayuda de la espátula rellene el circulo ovoide
Coloque el resto de crema en la superficie. Todo con cierta rapidez, para que la crema no se endureciera en demasía
Coloque las frutas intentando dar una imagen atractiva y solo se me ocurrió hacer una empalizada de fresones partidos a la mitad, para tapar los bordes que no eran nada atractivos a la vista.
Coloque los adornos de cumpleaños, la vela . Por cierto solo con la cifra final, omitiendo la primera cifra; ya estamos en unas edades que se hieren sensibilidades a determinadas personas:)
Finalmente seguí instrucciones de un sobre de gelatina para dar brillo a las tartas. No dice mas que disolver el sobre en azúcar y agua y calentar. Se compran en grandes superficies, carrefour suele tenerlos.
Pinte con el brillo y ¡voila!, ¡al fin una tarta de cumpleaños para hoy domingo!. La parte buena de la cocina es que es como la energía, ¡no se destruye solo se transforma!
Creo que no ha quedado tan mal y encima me he pasado toda la mañana riéndome con el desastre!!!.
NOTA: cuando vi el resultado del hojaldre me entretuve en leer la etiqueta del embalaje y fue cuando descubrí que había comprado un hojaldre sin grasa, sin gluten y sin...hojaldre!!! :) Creo que nunca mas lo haré, si lo quiero bío-ecológico lo haré en casa con los productos bío-ecológicos.
NOTA: cuando vi el resultado del hojaldre me entretuve en leer la etiqueta del embalaje y fue cuando descubrí que había comprado un hojaldre sin grasa, sin gluten y sin...hojaldre!!! :) Creo que nunca mas lo haré, si lo quiero bío-ecológico lo haré en casa con los productos bío-ecológicos.
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